jueves, 7 de junio de 2007

Dios estuvo de visita en Curepto

Navegando en Internet encontré este reportaje de un periodista de Diario El Centro y me pareció interesante, por el cariño que le tuvimos la mayoría de los cureptanos al Padre José Cappel, me dieron ganas de colocarla aquí, aunque es vieja y él estaba vivo.

Un cura que pinta para santo
Nombre del Periodista: Felipe Rojas
12-04-2004

El presbítero José Cappel lleva 55 años como párroco de la parroquia de Curepto. Tiene 95 y todavía celebra misas pese a sus deficiencias físicas y una diabetes avanzada. Se comenta que Dios está de visita en Curepto

“Conversemos no más, a las cinco me voy a Talca para la misa crismal donde renovamos los votos como sacerdote y nos entregan los cirios bendecidos para este año. Me tiene que hablar fuerte… no escucho mucho”, con esta frase recibió el cura Cappel de 95 años al equipo periodístico de Segundo Cuerpo, en la casa parroquial de la iglesia de Curepto.Conversar con Cappel es realmente meterse en un ambiente de serenidad y de fe que conmueve. También significa estar muy concentrado para poder entender su complicado español-inglés.
El hombre, a lo largo de sus 69 años de sacerdote, sencillamente quedó atrás, transformándose en un pastor de tiempo completo. En los 55 años que lleva en Curepto, todo el mundo lo quiere y le reconoce su labor pastoral a lo largo de toda su vida sacerdotal. Muchos opinan que es un santo por todo el bien que hizo en el poblado, otros van más allá y le otorgan poderes para “limpiar” de los malos espíritus a todas aquellas personas o incluso siembras que presentaban problemas.

En fin, el cura por donde se quiera ver, está en cada una de las vidas de sus fieles. Su objetivo de predicar la palabra de Dios sencillamente lo sobrepasó hasta el punto de ser visto como alguien celestial... muchos dicen que Dios está de visita en Curepto desde que llegó los últimos días de diciembre del año 1949.

Nacido en Estados Unidos el 16 de noviembre de 1908, el cura dejó su país y a su familia (seis hermanos) para evangelizar alrededor del mundo. A principios de la década del cuarenta se encontraba en Corea, China, cuando se produjo el ataque a Pearl Harbor. Por su condición de americano el mismo día del bombardeo fue tomado prisionero, junto a nueve sacerdotes, después de un año fue trasladado a Japón.

Tras obtener la venia de sus captores, él y sus compañeros fueron canjeados como prisioneros de guerra. “Cuando estábamos en Japón, un día nos subieron a un barco y comenzamos a navegar por muchos días, yo creo que meses. De pronto un día llegamos a un puerto donde cada uno de nosotros fue canjeado por un prisionero japonés. Como a los tres días supimos que estábamos en una playa en el sur de África”, recordó el sacerdote.Una vez liberado, Cappel se puso a disposición de su congregación para ser enviado a otra parte del orbe para seguir su evangelización. Su destino recayó en Chile.

LLEGA AL PAÍS

“Cuando me enviaron a Chile, me mandaron a La Serena, pero cuando estaba punto de viajar me solicitaron que fuera a trabajar a la diócesis de Chillán. Comencé a trabajar en Pemuco, ahí estuve un poco más de un año y me mandaron a Temuco”, señaló.

Con un trabajo ya organizado en la Novena Región, nuevamente recibió el llamado de sus superiores. Ahora el lugar elegido para evangelizar era Curepto.“Me acuerdo que viajé en una bicimoto que me había construido con un motor de un cilindro. Me demoré muchísimo, puesto que casi no había caminos acá en Curepto”.

Acostumbrado a las adversidades -la guerra dice que le enseñó ver el mundo bajo otro prisma- comenzó a sembrar su trabajo pastoral. Lejos de quedarse en el poblado atendiendo a los fieles, el cura se dedicó a conocer cada uno de los rincones de la comuna. Al poco tiempo ya todo el mundo conocía su espíritu pastoral, razón que le hacía merecedor de acudir a los campos más alejados donde solicitaban su ayuda espiritual y muchas veces material. “Como nunca fui bueno para el caballo, me gustaba andar en bicicleta, la que después de un tiempo se transformó en una bicimoto (…) A veces que anduve a caballo en vez de tomar las riendas me afirmaba de las orejas para no caerme”, explicó con picardía.

Después de mucho tiempo el medio de transporte de Cappel fue una moto. Durante su carrera evangelizadora fundió 11 motos, las que terminaban en chatarra producto de las constantes subidas a tantos cerros.

Según cuentan en el pueblo al sacerdote no le interesaba si era verano o invierno, él partía a la hora que fuese a cumplir con su misión. Varias veces partía en medio de tremendos temporales a los cerros a entregar la comunión a un moribundo volviendo en la madrugada todo mojado. “En muchas ocasiones el padre llegaba sin su chaqueta, en chaleco con pura polera, a veces hasta sin zapatos. Todo lo regalaba en los campos”, comentó Amada Correa, mujer que asiste al sacerdote en la casa parroquial y que lo conoce desde su nacimiento, “el padre me bautizó”, contó orgullosa.

La encargada de la pensión La Orilla, de Curepto manifestó que nunca ha vuelto a conocer a una persona tan buena como el cura. “Siempre me mandaba a gente que no tenía donde quedarse a la pensión haciéndose él cargo de los gastos. Recuerdo una vez había un preso de Valdivia y llegaron a verlo diez familiares, el padre canceló los costos de todos ellos. Igual yo creo que muchos se aprovechaban de él”, señaló.

También cuentan los fieles, que una vez el cura una noche de invierno, salió a un campo a ver a un enfermo que estaba muy grave, con su linterna y su bicicleta, comentan que anduvo más de sesenta kilómetros. Una vez de vuelta hacia el pueblo, producto del temporal el sacerdote cayó a una zanja de más de dos metros. El cura quedó atrapado sin ninguna posibilidad de salir, lo único que atinó fue hacer señales con su linterna. Luego de un par de horas y por fortuna un hombre descubrió a Cappel casi muerto de frío sacándolo de su casi mortal trampa. Otro episodio inolvidable fue cuando atacó al poblado una fiebre que dejó como saldo muchos muertos. Durante una tarde el sacerdote realizó varios funerales, subía un cortejo (el cementerio queda sobre una loma) y al rato bajaba a buscar el otro. Más de diez veces repitió el ejercicio, recordaron los habitantes.

PODERES

Durante muchos años los campesinos se acercaban al presbítero en tiempo de siembra para que “espantara”, a través de sus oraciones, a las plagas de cuncunas que se comían las semillas de los porotos, arvejas y de las papas. “Muchas veces apliqué el ritual católico que tiene una oración que se debe usar con el permiso del obispo”, explicó el presbítero. Cuando el cura terminaba sus plegarias los insectos, inexplicablemente, se retiraban del lugar, causando gran admiración en los campesinos que sencillamente después veneraban al sacerdote.

Lejos de importarle toda la “fama” adquirida por el desarrollo de su apostolado, el sacerdote siempre se preocupó de cumplir con sus responsabilidades eclesiásticas.

Ante la pregunta de si le gustaría quedarse a vivir “para siempre” en Curepto, el sacerdote responde que le gusta mucho el pueblo, pues es el lugar donde ha estado más tiempo en su vida, sin embargo, afirma que si sus superiores lo destinan a otra comunidad el tendría que irse para cumplir su nueva misión. Pese a estar jubilado hace años sigue pensando que está activo y que lo pueden trasladar en cualquier momento.

El tema de la jubilación, en realidad hay que tomarlo con cierta cautela, puesto que el padre sigue haciendo misas, prácticamente todos los días. “Los muchachos jóvenes me ayudan con las lecturas y yo hago la consagración del pan y el vino y por supuesto la predica. El problema más grande que tengo es que veo muy poco”, afirma un tanto molesto.

El café que nos sirvieron para la entrevista se ha terminado, llevamos un poco más de media hora de conversación, los 95 años de edad de Cappel comenzaron a pasarle la cuenta. El padre debe descansar, pues debe tener fuerza para escuchar la misa crismal en la catedral de Talca. Lamentablemente la conversación termina; sin embargo, nos quedó la sensación de que conocimos a una persona especial o por lo menos mucho más cercana a Dios que el equipo periodístico que realizó este reportaje.

7 comentarios:

caraya dijo...

Sabes cuando miro atrás y veo que en mi vida se han cruzado personas tan maravillosas y que de las cuales he obtenido lecciones,y que por el ciclo de la vida, hoy no están presentes en la tierra, en forma presencial, me doy cuenta lo afortunada que soy...
enumero:
1.- Mi awelita!! que viejita mas maravillosa y linda! tu sabes que a pesar de los chistes era mi awelitaaa pooo!!! jamás una critica, malas palabras,malas acciones, siempre humilde y con un cariño para entregar hasta decir basta...

2.- El señor que mencionas en tu blog! el Padre Cappel...que orgullo siento poder sentir que mis sacramentos primordiales fueron entregados por él... tantas tardes de palabras sabias en la casa de mi awelita, alrededor de un brasero y un mate en la mano!! y para que describir la paz y la ternura que su sola presencia irradiaba!!...
3.- Mi gran amigo, y hermanitoo del camino Sebastián "Sebis" jeje un ser humano de una entrega, transparencia, sencillez, bondad, enamoradizo jajaja... un gran amigo! eso y lo que siempre he dicho,yo soy amiga como soy, porque el me enseño que significa la palabra amistad!, que para ello no existen barreras de tiempo, espacio ni lugar... que es estar con... para esa persona... cuando hay que defender como uno solo... en fin tantas cosas que me hacen ser como soy... igual suena un poco arrogante jajaja pero yo me siento así!!...

Te quiero y gracias por este recuerdo que trajiste de tan lindo personaje que de una u otra forma marcó generaciones en Curepto!

Besos!

chau

fabiopower dijo...

Hola Kiru!
como dicen , a veces menos es más, y quizás fue bastante breve nuestro saludo en Coppelias, no me cabe ninguna duda de que cualquier día por ahí nos "terciaremos".
Con respecto a lo que posteaste en tu blog, te cuento que hace algunos años atrás, entré a la iglesia de Curepto con una cámara para grabar algunas imágenes para tenerlas de archivo, y me encontré casualmente con el padre Cappel. Ya estaba bastante enfermo, por lo que solo lo saludé y luego empecé a seguirlo con la cámara sin que él se diera cuenta. Aunque fueron solo algunos minutos de grabación, y bastante modestos ( era cinta HI8 análoga), creí que probablemente algún día a alguien podría interesarle este registro. Creo que no fue hace muchos meses cuando encontré esta cinta y las edité en un clip de 3 minutos. Espero que más temprano que tarde, subiré eas imágenes a youtube para compartirlas contigo y con todos los interesados. Ahí te avisaré.
ASTEROIDES sale esta semana...SÍ O SÍ....¿ como puedo enviarte un ejemplar de regalo?..en todo caso, yo voy pal feriado largo y Omar tendrá todas las copias

Marcelo Aliaga dijo...

Acabo de pasar por tu youtube, y me sorprendió ver la video composición.

Te agregaré a mis feeds!

Saludos!

Anónimo dijo...

HABEMUS ASTEROIDES...

HABEMUS ASTEROIDES...


estamos..ya esta...

aun emocionado, acabo de llegar de la imprenta...

Anónimo dijo...

I'm in a love/hate relationship with virtual memory because of the way prices are always,and I domean always dropping. I hate buying SDs for my R4 / R4i at (what seems to be) a bargain price only to see it become ten percent cheaper a few weeks later.

(Submitted by NetBrowze for R4i Nintendo DS.)

Anónimo dijo...

Digital memory,to me, is something that I seemingly will never have enough of. It feels like megabytes and gigabytes have become an inseparable part of my day to day existence. Ever since I bought a Micro SD Card for my Nintendo DS flash card, I've been constantly vigilant for high memory at cheap prices. I feel like I'm going insane.

(Submitted using Nintendo DS running [url=http://www.youtube.com/watch?v=0TA58lFC0gE]R4i[/url] TF3)

Anónimo dijo...

Hola yo tengo una carta q,el padre cappel le mando a mi abuelta desde ohio,eua. Cuando mi abuelo leopoldo Rivera Diaz, murio ahogado en el rio Mataquito,calpun el año 62 eso demuestra el grado de compromiso del padre para con sus ferigreses ,, esta carta la atesoro desde el fallecimiento de mi abuelita filomena cristina Diaz Marquez ,el 2007 pero me gustaria entregarla al museo de curepto ,yo se hay uns sala dedicada al padre en mis manos se podria perder o destruirse,,,, cualquer cosa publicar muchas gracias.